El parque temático Disneylandia se ha convertido en una víctima más de la crisis económica mundial, luego de que en el último mes ha despedido a más de dos mil personas, e inclusive ha brindado ofertas de alojamiento para elevar sus ingresos.
Así mismo, los ingresos de la división de parques y resorts de la compañía Disney han caído un 4% durante el primer trimestre fiscal de 2009, que comprende desde octubre hasta diciembre de 2008, hasta los 2.000 millones de euros. Además, la compañía ha informado que los ingresos operativos se han reducido igualmente en un 24%, hasta los 298 millones de euros.
Según la compañía, la bajada de los ingresos operativos se debe a la menor actividad que han sufrido los parques durante este periodo y a la bajada de la ocupación en sus establecimientos hoteleros. Rober Iger, presidente de la empresa, ha explicado que la crisis económica “ha causado un fuerte impacto en los negocios de la entidad” y que están obligados “a confrontar las actuales circunstancias, pero debemos seguir invirtiendo en la creatividad, las grandes marcas y los recursos, que son las fortalezas de Disney y las claves para su éxito a largo plazo”.
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